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Antes de recibir Pedro Grases el Premio Nacional de Literatura 1993 (Venezuela), la Editorial Ayacucho se adelanta en cuatro años y publica sus Escritos Selectos, rompiendo con su tradición editorial. Había sido galardonado con el Premio «Catalunya Enfora», estuvo nominado al Premio Príncipe de Asturias y la Universidad de Siracusa en los Estados Unidos le da el «Premio Internacional Nicolás Antonio».
En 1993 le fue conferido a Grases por unanimidad el máximo galardón nacional, firmaban el diploma sus ex-alumnos del Instituto Nacional Pedagógico Alexis Márquez Rodríguez, Efraín Subero, José Santos Urriola y el poeta Hesnor Rivera, junto al doctor José Antonio Abreu, Presidente del Conac,… Solía decir Abreu que Grases era su maestro y que fue de los primeros en apoyar su proyecto del Sistema Nacional de Orquestas.
Dos días después de recibir el Premio Nacional de Literatura, Pedro Grases recibe la Certificación de que 5 árboles del Bosque Simón Bolívar de Jerusalén llevan su nombre, iniciativa de la señora Clara Sznajderman y familia. La distinguida dama era vecina de los Grases en La Castellana y era fundadora del Estado de Israel.
Un año más tarde se realiza la gran exposición temática Pedro Grases en la Biblioteca Nacional: la pasión de un bibliógrafo, cuyo título se inspira en artículo de Guillermo Sucre, figura de las letras nacionales. (“La discreta pasión de un bibliógrafo”. En: Revista Imagen. Caracas, N° 25, del 15-30 de mayo de 1968). Colaboró en el montaje y selección de la memorabilia su hija María A. Grases Galofré. Fue todo un acontecimiento cultural en el que reconocimiento, la admiración y el afecto se unieron para honrar al humanista venezolano-catalán. El homenajeado dedicó en el espacio de Maestros y amigos su libro recientemente impreso por Seix Barral titulado Un paso cada día, Vol. 19 de Obras de Pedro Grases.
En el 2006 inicia la Editorial El perro y la rana su Colección de Premios Nacionales, orientada a la masificación de la lectura. Entre los primeros números está el libro Pedro Grases Premio Nacional de Literatura 1993. La Fundación Pedro Grases ofrece esta publicación, pero observa ciertos fallos en la parte biográfica y pondera la segunda Obra Literaria, que resume el sentido de vida y obra del gran maestro. Nuestro reconocimiento a Wilfredo Guerra.
Fundación Pedro Grases
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Premio Nacional de Literatura 1993La pasión de un bibliógrafo
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